DECLARACIÓN DE AMARC ARGENTINA
SOBRE LA SUSUPENSIÓN DE LA LEY DE SERVICIOS DE COMUNICACIÓN
AUDIOVISUAL
El proceso de democratización de la comunicación y la cultura en Argentina
demoró más de 25 años, demandó una activa participación ciudadana y se convirtió en un elemento central de la democratización de la sociedad. Como resultado de la acción militante de múltiples actores y actoras por este derecho, de una multiplicidad diversa y democrática, en octubre de 2009 el Congreso Nacional logró aprobar la LEY DE SERVICIOS DE COMUNICACIÓN AUDIOVISUAL, una norma democrática y democratizadora desde su origen hasta su articulado, desde su debate hasta su materialización.
La reciente suspensión de su aplicación por parte de la Cámara Federal de
Apelaciones de Mendoza reabre una de las heridas centrales en la construcción de nuestra ciudadanía. El fallo, cuya legalidad es tan discutible como su legitimidad, tiene como consecuencia que se vuelva a definir como marco normativo para el ejercicio de la radiodifusión la norma de facto 22.285, sancionada durante la dictadura cívico militar más cruel de nuestra historia y modificada con los múltiples cambios que, aún durante la democracia, permitieron la concentración de la propiedad de los medios de comunicación y el debilitamiento del derecho a la información en Argentina. De este modo, se restituye un marco normativo de carácter centralista, privatista y que excluye a muchos sectores de la posibilidad de expresarse.
Por estas razones, y porque comprendemos la necesidad de establecer un marco
normativo democrático como punto de partida para la democratización de la sociedad en
la que vivimos, AMARC ARGENTINA ratifica su compromiso con la aplicación de la LEY DE SERVICIOS DE COMUNICAICÓN AUDIOVISUAL 26.522/09, aprobada por amplias y diversas mayorías y fruto de un debate profundo, representativo y federal. Y demanda su urgente puesta en vigencia y su reglamentación en un marco de activa participación para garantizar la libertad de expresión, un derecho humano que nos hace ciudadanos y ciudadanas.
AMARC ARGENTINA, 15 de abril de 2010
SOBRE LA SUSUPENSIÓN DE LA LEY DE SERVICIOS DE COMUNICACIÓN
AUDIOVISUAL
El proceso de democratización de la comunicación y la cultura en Argentina
demoró más de 25 años, demandó una activa participación ciudadana y se convirtió en un elemento central de la democratización de la sociedad. Como resultado de la acción militante de múltiples actores y actoras por este derecho, de una multiplicidad diversa y democrática, en octubre de 2009 el Congreso Nacional logró aprobar la LEY DE SERVICIOS DE COMUNICACIÓN AUDIOVISUAL, una norma democrática y democratizadora desde su origen hasta su articulado, desde su debate hasta su materialización.
La reciente suspensión de su aplicación por parte de la Cámara Federal de
Apelaciones de Mendoza reabre una de las heridas centrales en la construcción de nuestra ciudadanía. El fallo, cuya legalidad es tan discutible como su legitimidad, tiene como consecuencia que se vuelva a definir como marco normativo para el ejercicio de la radiodifusión la norma de facto 22.285, sancionada durante la dictadura cívico militar más cruel de nuestra historia y modificada con los múltiples cambios que, aún durante la democracia, permitieron la concentración de la propiedad de los medios de comunicación y el debilitamiento del derecho a la información en Argentina. De este modo, se restituye un marco normativo de carácter centralista, privatista y que excluye a muchos sectores de la posibilidad de expresarse.
Por estas razones, y porque comprendemos la necesidad de establecer un marco
normativo democrático como punto de partida para la democratización de la sociedad en
la que vivimos, AMARC ARGENTINA ratifica su compromiso con la aplicación de la LEY DE SERVICIOS DE COMUNICAICÓN AUDIOVISUAL 26.522/09, aprobada por amplias y diversas mayorías y fruto de un debate profundo, representativo y federal. Y demanda su urgente puesta en vigencia y su reglamentación en un marco de activa participación para garantizar la libertad de expresión, un derecho humano que nos hace ciudadanos y ciudadanas.
AMARC ARGENTINA, 15 de abril de 2010
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